Altar callejero del siglo XVIII, se trata de un monumento único en la provincia, ya que carece de dueño, los vecinos de Carcabuey se encargan de su mantenimiento. La Virgen de las Angustias tiene gran fervor popular, no en vano era desde su plaza, La Cruz de los Mozos, donde se despedían los mozos llamados a Quintas.

En la antigua calle de las Parras, hoy Obispo Pérez Muñoz, formando esquina en la Plazoleta de la Cruz de los Mozos, hay un altar bajo la advocación de Nuestra Señora de las Angustias, único en la provincia de Córdoba por su valor artístico y calidad de materiales, como por la peculiaridad de que carece de dueños al no pertenecer al ayuntamiento ni a la iglesia. Fue construido, según testimonios orales de los vecinos, por el antiguo dueño de la casa colindante, quien lo mandaría levantar por devoción a la imagen, en una fecha sin determinar. Tras el fallecimiento del propietario, fueron los vecinos quienes se encargaron del mantenimiento y las limpiezas periódicas, aunque el inmueble en sí carece de propietarios. En su interior alberga La imagen de la Virgen de las Angustias es una talla de madera policromada atribuida a la escuela granadina y fechable en torno al último tercio del siglo XVIII. Recientemente ha sido restaurado el templete centrándose la intervención en la cubierta y columnas, cerramiento de la hornacina para proteger la imagen de las inclemencias meteorológicas, animales, etc., y se ha pintado el interior de color azul ya que este es el color de la virgen aunque la imagen sigue aún pendiente de restauración. La Virgen de las Angustias tiene gran fervor popular, no en vano era desde su plaza, La Cruz de los Mozos, donde se despedían los Mozos llamados a Quintas.